La educación sexual también figuraba entre las preocupaciones de la Fundación Arpegio de Granados y Aguirre, que habría invertido en sólo un año más de 255.000 euros en talleres organizados por una organización de raíz católica.

Se trata de una ONG que defendía entre los jóvenes la abstinencia y la castidad para prevenir el sida. Fueron otorgados, según 'El Mundo', bajo la marca de la casa, a dedo. "No se hacía concurso público ni se fiscalizaba", explica Pablo Herraiz, periodista.

En declaraciones a laSexta, la ONG sí reconoce un pago en 2008 de casi 100.000 euros, una cantidad desproporcionada si la comparamos con lo que recibe la Coordinadora Estatal de lucha contra el sida, apenas 8.000 euros anuales. "Es desorbitado, ninguna fundación recibe ese dinero", explica Reyes Velayos, vocal de CESIDA.

En una carta a ‘El Mundo’, Esperanza Aguirre aseguraba que la abogada de la fundación no ha especificado que fuera su "chiringuito", pero basta con oír su declaración para saber quién parecía mover los hilos en Arpegio.