Frente a la moción de censura del PSOE, el PP reclama tiempo. "La oposición tiene que ser responsable y esperar y confiar en la separación de poderes. Por nuestra parte, prudencia absoluta", ha dicho Pablo Casado, vicesecretario de Comunicación de la formación.
Los socialistas no lo tienen fácil, porque necesita a Ciudadanos, que ya ha dicho que no. Mario Jiménez, portavoz de la gestora del PSOE, ha afirmado que "uno no se puede presentar ante la ciudadanía diciendo que es el partido del cambio y que cuando llega la oportunidad no lo hace posible".
Sólo la admitiría para convocar nuevas elecciones, así que ofrecen otra alternativa: "Un presidente del PP limpio que no tenga sospecha de corrupción, alguno habrá; igual es que no tienen ninguno y ese es el problema". Así lo ha afirmado Inés Arrimada, portavoz de la Ejecutiva de Ciudadanos.
Una opción, la de relevar a Pedro Antonio Sánchez, que según el diario La Razón, ya contempla el PP. Su coordinador general, Martínez Maillo, sin referirse expresamente al presidente murciano, desliza esta idea. En declaraciones a IB ha destacado la necesidad de "mirar más allá de uno mismo porque nadie es imprescindible en el PP y todos son necesarios".
Hasta ahora, Gobierno y partido siempre han defendido su inocencia, incluso restan importancia al encuentro del PP de Murcia con el juez del caso Auditorio. Méndez de Vigo, portavoz del Ejecutivo, ha declarado que "en Murcia todo el mundo se conoce y no hay que sacar conclusiones extrañas".
Ese magistrado es quien escuchará a los peritos que declararán a petición de Pedro Antonio Sánchez y, si le convencen, podría archivar el caso. El antecesor del presidente murciano, dice lamentar que Rajoy no está luchando contra estos casos: "Es curioso que ahora me revele contra los casos de corrupción también de mi propio partido". Así lo dijo en ARV Alberto Garre. Las próximas horas serán decisivas para el futuro de la región.