"Hay muchos empresarios catalanes que se han visto castigados en Cataluña y también en el resto de España y lo único que han hecho es arriesgar, invertir, crear puestos de trabajo e intentar hacer bien cosas", ha afirmado Rajoy durante una visita a las bodegas Freixenet, en Sant Sadurní d'Anoia, junto al candidato del PPC a la presidencia de la Generalitat, Xavier García Albiol.
En una breve alocución ante la prensa, el presidente del Gobierno ha pedido "que no se castigue a nadie ni se boicotee a nadie por la circunstancia de ser catalán" y ha recalcado que Freixenet y las demás compañías catalanas merecen "el mismo trato" que cualquier otro empresario español.
Rajoy ha expresado su apoyo a las más de 3.000 empresas catalanas que en los dos últimos meses han decidido trasladar su sede social a otras comunidades "en defensa de sus legítimos intereses y de los puestos de trabajo", una situación que ha calificado de "enorme gravedad" y que ha atribuido a las "decisiones irresponsables de algunos", en alusión a los impulsores del proceso independentista.
Ha mostrado asimismo su apoyo a aquellas compañías que han decidido mantener su domicilio social en Cataluña, como es el caso de Freixenet, que, aunque en un principio se planteó el cambio de sede, finalmente acordó mantenerla en Sant Sadurní tras la aplicación del artículo 155.
"Trabajaremos hasta el final para que todo el mundo vuelva a Cataluña y para que esté cómodo y haya una situación de normalidad, que al fin y a la postre es lo que todos deseamos", ha manifestado.
El presidente de Freixenet, José Luis Bonet, ha agradecido la visita de Rajoy, "amigo de esta casa", y ha destacado que lo que quieren los empresarios es "tener normalidad", un normalidad que en Cataluña se ha producido, ha dicho, gracias a la aplicación del artículo 155.
Mariano Rajoy también ha aseverado que le gustaría que en las elecciones del próximo 21 de diciembre Cataluña volviera a una situación de estabilidad y de tranquilidad, y ha recordado que tras estos comicios "el Gobierno de España será el mismo, con el mismo presidente y los mismos ministros y apoyos que tiene hoy".
El líder del PP se ha mostrado dispuesto a hablar con el nuevo Govern que surja de las elecciones, pero ha remarcado que no va a aceptar "de ninguna manera imposiciones, ni que Cataluña se quede fuera de España ni de Europa, ni que sus empresarios se queden en una situación de indefensión como consecuencia de caprichosas y arbitrarias decisiones".
Por su parte, Xavier García Albiol ha mostrado su apoyo a los empresarios y emprendedores catalanes y ha puesto a Freixenet como ejemplo de "esfuerzo, trabajo, constancia y sentido común".
Ha remarcado asimismo el "gesto" de Freixenet de quedarse por el momento en Cataluña y ha asegurado que gracias a la confianza generada por el artículo 155 en el mundo de la empresa "se ha abierto un período de esperanza, certidumbre e ilusión" que espera que se mantenga tras el 21D con un nuevo gobierno catalán de partidos constitucionalistas.