A algunos colegios electorales se llega siguiendo el camino de baldosas amarillas.Dentro, los miembros de la mesa electoral tienen prohibido por la Junta Electoral Central llevar cualquier lazo de este color.
Sí se ha podido ver un jersey amarillo a una presidenta de mesa y a otra mujer de jersey morado y chaqueta amarilla que se fotografía con la alcaldesa Colau y que después desempeña su colorido puesto en mesa electoral.
Interventores y apoderados tampoco pueden llevar ese color, pero sí las cintas amarillas de las que cuelgan sus acreditaciones, porque es el color de sus partidos.
¿Y los votantes? En una madrugadora cola se ha podido ver una bufanda, un abrigo, una camiseta: un buen resumen de lo que encontramos dentro.
La Junta Electoral Central está de guardia por si algún presidente de mesa le comunica alguna consulta o denuncia por incumplimiento de la norma. De momento, los lazos los acaparan los políticos.