Urnas, votos y candidatos... todo listo para la jornada electoral más decisiva en la historia de Cataluña. Son nueve candidaturas, pero siete están entre las más conocidas, a las que se unen Recortes cero y el partido animalista PACMA.
Más de 5'5 millones de votantes repartidos en los 947 municipios que acudirán a los 2.600 colegios electorales. Unas elecciones tan trascendentes que según la consellera de Gobernación, Meritxell Borràs, "ha habido más solicitudes del voto por correo que en las últimas elecciones de 2012".
Un 56% en concreto, o lo que es lo mismo, 131.033 personas más que en los últimos comicios. Un aumento del voto por correo que asciende al 70% si sólo nos fijamos en los votantes desde dentro del territorio español.
.Cerca de 10.000 mossos y policías velarán por la seguridad del 27S
Para evitar cualquier incidencia, casi 10.000 mossos d'esquadra y policías locales velarán por la seguridad del 27S. Según ha podido saber laSexta, desde el ministerio de Interior movilizarán sólo para Barcelona 19 grupos de antidisturbios con 50 agentes cada uno.
Una inédita expectación mediática que será narrada por 77 medios de comunicación y 580 periodistas de todo el mundo.
Intensa campaña electoral para unos comicios decisivos
La campaña electoral catalana ha sido poco usual y ha pivotado en los pros y contras de la independencia de Cataluña, la probable salida de la UE si consuma la secesión, los pronunciamientos de altos dirigentes internacionales a favor de la unidad de España -incluido Barack Obama-, la voz de empresarios alertando sobre la independencia y, muy importante en la "foto finish" electoral, las llamadas a la participación.
Unas elecciones catalanas jamás han alcanzado el 70% de participación y muchos estudios consideran que si se supera dicho umbral, el voto no soberanista del área metropolitana de Barcelona podría frenar a un movimiento independentista muy movilizado y que, según los sondeos, tiene serias opciones de ganar en escaños el 27S, aunque más difícilmente en votos.
En este contexto, los líderes nacionales se han volcado en la campaña catalana como nunca y hasta el último momento. Mariano Rajoy (PP), Pedro Sánchez (PSOE), Pablo Iglesias (Podemos), Alberto Garzón (IU) y, por supuesto porque "juega' en casa" Albert Rivera (Ciudadanos) se han volcado en actos y mítines electorales. Y no por casualidad, puesto que las generales se celebrarán en tan sólo tres meses.
La campaña también ha tenido un gran acento mediático por la gran cantidad de debates de televisión y radio de los siete candidatos, a los que no ha acudido el president Artur Mas pese a optar a la renovación del cargo.
Su plaza ha sido ocupada en la mayoría de casos por el cartel electoral de Junts pel Sí, el exdirigente de ICV Raül Romeva, que ha medido su grado de exposición en los medios para no tener que rendir cuentas de una legislatura catalana marcada por los recortes sociales derivados de la crisis económica.
La guinda de la campaña la puso el líder de ERC en Barcelona, Alfred Bosch, quegeneró una guerra de banderas en el balcón del Ayuntamiento durante las fiestas patronales de la Mercè al colgar una "estelada", un gesto que generó indignación en amplios sectores y que provocó incluso su disculpa pública.