El PP de Alberto Núñez Feijóo se sitúa cerca de la cuarta mayoría absoluta en Galicia según los sondeos a pie de urna de RTVE y FORTA, que le otorgan entre 37 y 40 escaños. Son 38 los necesarios para gobernar en solitario en el parlamento gallego.
Sin embargo, los resultados no son todo lo positivos que desearían los populares, donde son los máximos favoritos a reeditar la mayoría absoluta que ya han logrado en las tres últimas elecciones autonómicas. Y es que si atendemos a la horquilla que le otorga al PP, el más bajo de los cuatro resultados que se prevén dejarían a Feijóo a un asiento de la mayoría absoluta.
Desde el partido, sin embargo, mandan un mensaje de tranquilidad recordando que otras encuestas les otorgan una amplia mayoría absoluta y que tres de las cuatro opciones de la horquilla de estos sondeos les valdrían para lograr ese objetivo.
Por su parte, se produciría un vuelco en la oposición, donde el BNG se sitúa entre los 19 y 22 escaños, muy por encima de los 12-14 de los socialistas. Es un vuelco importante si atendemos a los resultados de estos dos partidos en 2016, cuando los socialistas lograron 14 escaños y el BNG 6.
La gran caída la protagoniza Galicia en Común-Anova-Mareas, que cae hasta los dos escaños después de haberse situado con 14 en las pasadas elecciones, donde fueron el partido menos votado.
Vox, por su parte, se quedaría fuera del parlamento gallego aunque desde el partido piden cautela recordando que las encuestas en las elecciones andaluzas les otorgaron un resultado inferior al que finalmente obtuvieron. Ciudadanos seguiría sin representación en Galicia.
¿Qué es un sondeo a pie de urna?
El sondeo a pie de urna se realiza el mismo día de la jornada electoral, a la salida de los colegios cuando los ciudadanos acaban de depositar su voto. Este tipo de encuestas permite a los medios de comunicación tener información sobre la tendencia de voto y estimar los escaños que logrará cada partido, mientras esperan los resultados del escrutinio, que comienzan a conocerse a partir de las 20:00 horas, al cierre de los colegios electorales.
La complejidad de los sondeos a pie de urna reside en el poco tiempo que tienen los medios para reunir los datos recogidos durante el día y organizarlos para anticipar el resultado final.
También conocidos como 'israelitas', estas encuestas han permitido conocer el voto de la ciudadanía vasca y gallega en los comicios autonómicos de años anteriores. Por ejemplo, en las últimas elecciones de 2016, los sondeos a pie de urna dieron en el clavo augurando la victoria absoluta del actual presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, por tercer año consecutivo.
Pero los sondeos a pie de urna también se equivocan y proporcionan resultados erróneos. Un ejemplo de ello ocurrió en las elecciones generales de junio de 2016 cuando predijeron de manera equívoca la victoria de Podemos sobre el PSOE.