En su primera intervención ante los cargos directivos de su partido, la flamante ganadora de las elecciones a la Comunidad de Madrid y actual presidenta en funciones, Isabel Díaz Ayuso, no ha perdido un minuto en avanzar cuál será su plan y su estrategia a seguir.
"He tenido mucho voto prestado", ha comentado ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP. "Por parte del que votaba por primera vez, también y por gente que jamás nos había mirado, y que nos ha visto anteponer los desvelos de la sociedad a los nuestros", ha sonreído, entre los aplausos de sus compañeros.
¿Y cómo va a retener a aquellos que la eligieron por primera vez? Con ilusión. "Que esta ilusión no pare. Quiero que siga por toda España. Es una misión nacional", ha pedido Ayuso ante Pablo Casado y resto de la dirección del partido, incluidos los barones regionales. "Ha cambiado el tablero, ha vuelto la ilusión. Los ciudadanos aman ese mensaje de libertad".
Ayuso, "puro PP"
A priori, puede parecer complicado conjugar el mensaje de enamorar a nuevos votantes fuera de su espectro y mantenerse fiel al partido. Pero, desde luego, no lo es a los ojos del presidente popular, que ha certificado que Ayuso es "puro PP". "Isabel es puro Partido Popular por los cuatro costados", ha sonreído.
La calma tras la euforia desaforada ha sido la tónica en Génova este miércoles. Ayuso, en su intervención, ha comentado que, precisamente, la ilusión ha sido el motor de su campaña. "No lo percibía desde hacía mucho tiempo que no", especialmente en los jóvenes.
"Hay cantera", ha sostenido la presidenta madrileña, gracias a "la pasión por la libertad y por una serie de principios imprescindibles frente a discursos de la izquierda, como las revoluciones o la venta fácil del sentimiento que luego genera tanta frustración. La juventud se ha vuelto a ver representada en el PP, en las políticas liberales de Madrid".
"Un escenario muy prometedor"
Así, y a sus ojos, ha habido un cambio de ciclo político, con el viento de cara para su partido. "Se abre un escenario ante nosotros muy prometedor", ha incidido, para señalar un problema en Moncloa: que, según ella, ahora han de luchar contra la certeza de "que, salvo de demoscópico, de político no hay nada en ese Gobierno".
Pero en la arena que a ella le corresponde, la Asamblea de Madrid, ya no competirá con el PSOE enfrente. La líder de la oposición es Mónica García, la candidata de Más Madrid, que aunque empata en escaños con Ángel Gabilondo, sí ha recibido más votos. "Me preocupa tener en la oposición de Madrid a los hermanos de Podemos. Se travisten de algo, pero son iguales. No hemos llegado hasta aquí para volver a lo mismo".
Pablo Casado, por su parte, en su intervención posterior, ha loado la figura y la casi gesta de Ayuso. El sentido del partido va en su misma dirección, y, sobre todo, ha subrayado que "cada voto es un voto de ejemplaridad y compromiso firme".
"Hemos trascendido nuestras siglas"
"Hoy ya somos la primera fuerza, porque hemos unido en el PP a la mayoría del centro derecha y abrirnos a votantes de otros partidos, sin renunciar a nuestros principios y valores. Recuperamos todo el voto de Cs y abrimos una vía de agua en el del PSOE", ha analizado el presidente del PP.
El roto de votos a otras formaciones ha sido a ambos lados de su espectro. "Hemos trascendido el espacio que recibimos para nuestras siglas. Hemos ensanchado en la centralidad y transversalidad política y social", ha recordado Casado, en referencia clara al partido mermado que recibió de manos de Mariano Rajoy. "Además de predicar, hemos sabido dar trigo", ha guiñado.
Sobre el cambio de roles en el bloque de la izquierda, Casado ha incidido en que no sólo "ha habido un sorpasso de Más Madrid al PSOE", sino que Ayuso "ha quitado a Iglesias". "Parece ser que ha habido clara unificación de siglas en el PP, y no me alegro por ellos, pero es verdad que nunca hemos engañado, que era la única opción para ser alternativa de gobierno".
La felicitación del resto de barones
El resto de barones también han mostrado su satisfacción con el apuntalamiento del proyecto del PP. Porque la victoria es del PP de Madrid, sí, pero a todos les beneficia, aunque sea de segundas. Por ejemplo, el líder del partido en Galicia, Alberto Núñez Feijoó, el único que ostenta a día de hoy una mayoría absoluta, ha iniciado su intervención con una palabra: espectacular. "La victoria de Ayuso tiene mensaje enorme para los ciudadanos de España. Probablemente estemos ante un cambio que pueda permitirnos más noches como las de ayer. Hemos ampliado espectro político".
Su homólogo en la Región de Murcia, Fernando López Miras -en cuyo gobierno se inició todo el terremoto político que desembocó en estas elecciones-, también ha mostrado su alegría. "Se ha recuperado una ilusión que trasciende a la Comunidad de Madrid. Se está reunificando el voto del centro derecha. Todo ha comenzado en Murcia y tiene que acabar Casado en la Moncloa", ha indicado.
Juanma Moreno, el presidente de la Junta de Andalucía, ha sumado palabras en la misma línea. "Ayer fue una noche que ya nos merecíamos. Es un cambio de ciclo, Sánchez está perdiendo. El PP se dejará la piel en seguir creciendo", ha asegurado.
Por su parte, Alfonso Fernández Mañueco, el presidente de Castilla y León, ha escuchado a Casado y Ayuso, pero ha optado por no hablar, alegando que se tenía que ir a un acto.