Momento de tensión entre la candidata de Vox y la periodista Àngels Barceló, a la que Rocío Monasterio ha acusado de comportarse como una "activista política, agarrando de la manita" a Pablo Iglesias. La moderadora del debate intentaba evitar que el candidato de Unidas Podemos abandonara el estudio de la SER después de que Monasterio cuestionara las amenazas de muerte que ha recibido Iglesias.
Así, Barceló le recordaba a Monasterio que el debate no era un "espectáculo" sino "un debate electoral entre demócratas" y le pedía respeto. Algo a lo que Monasterio respondía aludiendo a que la moderadora mantenía agarrado del brazo a Pablo Iglesias, a punto éste de dejar la radio.
"No soy una activista política, soy una demócrata", le respondía con vehemencia la veterana periodista. Más adelante, en otro momento del debate, la candidata del partido de extrema derecha ha acusado a la moderadora de que la emisora ha "censurado las cuñas" de la campaña de Vox que incluían la palabra MENA. A lo que Àngels Barceló le ha respondido que "en esta casa no se censura a nadie" y que "esas cuñas constituyen un delito".
Monasterio también recibía la crítica del resto de candidatos presentes en el debate. Iglesias comenzaba el debate hablando de que la "tolerancia e impunidad van a más" tras recibir él y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, hayan recibido cartas con balas reales. "No es aceptable que la señora Monasterio ponga en duda lo ocurrido y si no se retracta vamos a abandonar el debate", amenazaba.
Luego, la cabeza de lista de Más Madrid, Mónica García, manifestaba su "condena sin paliativos" y todo su apoyo, "una reflexión del deterioro de la sociedad para que esto se haya normalizado y cristalizado el odio". "Absolutamente deplorable y aberrante", decía. Por su parte, la candidata de Vox pedía a Iglesias que denunciara también la violencia en sus mítines como en Vallecas.
"Le animo que vaya a denunciar estas amenazas. No nos creemos nada. Y si quiere pues lárgese, que es lo que queremos muchos españoles. Es muy fácil, que se levante, que lo están deseando un montón de españoles, que se vaya de España. Venga, me alegro que se vaya", decía. Iglesias explicaba, mientras se levantaba de la silla, a la presentadora del debate, Àngels Barceló, que "están cometiendo un error con esta gente blanqueándolos. Nosotros no vamos a debatir con la ultraderecha".