La única imagen que se ha visto en la calle Génova ha sido la de medios de comunicación con cara de pocos amigos y muchas preguntas en sus cuadernos. Se quedarán sin respuestas: no hemos vuelto a saber nada del polémico fin de contrato de Bárcenas, porque los populares creen que está todo dicho.

Los pocos que han hablado tampoco han sido muy claros, se remiten a la dirección del partido o a lo que conocen por los medios de comunicación. Del resto de incógnitas, nada de nada. Como cada lunes, pero más que nunca, se esperaba la comparecencia de la dirección del partido.

Sobre la mesa, la denuncia de Bárcenas al PP por el robo de dos ordenadores, la presencia posterior de la policía en Génova, la demanda de Luis Bárcenas por despido improcedente, o las tan anunciadas demandas contra el extesorero.

Cospedal no ha hablado, pero hemos podido saber que la secretaria general del PP sí se ha reunido con el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón. Dicen en el PP que era para tratar asuntos de Castilla-La Mancha, pero no se descarta que también se haya hablado del caso Bárcenas.

Pero los populares han demostrado últimamente llevar otro ritmo. Una tranquilidad que les permite dejar las explicaciones para otro día o tal vez, 'en diferido'.