"En mi partido, el hablar con exdirigentes no está prohibido". Así se ha pronunciado el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, sobre la comidaque compartió con su predecesor, Pablo Casado, coincidiendo con el aniversario de su caída. A preguntas de laSexta durante un acto este jueves, el actual líder de la oposición ha reconocido este encuentro y ha defendido que "no hay ningún tipo de mala conciencia con nadie".
"Yo hablo con todos los exdirigentes que ha tenido mi partido si les parece bien mantener un contacto conmigo y a mí me parece oportuno hacerlo, en este caso se produjeron las dos cuestiones: que a él le interese hablar conmigo y que a mí me parezca también interesante y oportuno hablar con él", ha expuesto el dirigente 'popular', que ha insistido en que "no hay nada que ocultar" ni "ninguna cuestión pendiente".
En este sentido, Feijóo ha remarcado que él "simplemente" se presentó a un congreso nacional del partido en el que fue elegido: "Un congreso democrático en un partido democrático es lo normal para sustituir a un líder", ha zanjado.
Casado, dedicado a "una actividad que requiere independencia"
El líder del PP, en cualquier caso, ha enmarcado la cita con su antecesor -un almuerzo privado en una taberna de Madrid- en "la normalidad de ir a comer con un compañero de partido, expresidente del partido" y ha asegurado que la relación entre ellos es "cordial". Según ha precisado, esa comida originalmente estaba prevista para Navidad, pero no pudo celebrarse entonces por problemas de agenda.
En cuanto a la situación actual de Casado, Feijóo ha indicado que este le ha trasladado que está dedicado a "una actividad profesional que requiere independencia partidista", una "actividad internacional" por la que no puede hacer actividad política, "al menos durante un tiempo".
Feijóo: "No compartimos la moción de censura"
Por otra parte, Feijóo se ha pronunciado también sobre la moción de censuraque Vox planea registrar el próximo lunes con Ramón Tamames como candidato y que, a todas luces, fracasará en el Congreso. Al respecto, el presidente del PP ha remarcado su respeto hacia el exdirigente del PCE y su "decisión personal", que los 'populares', sin embargo, no comparten.
"No compartimos la moción de censura", ha insistido asimismo, argumentando que no creen "que lo más oportuno para el cambio de Gobierno en España" sea "ofrecerle una victoria parlamentaria a un Gobierno" que tacha de "convulso", "dividido" y "en implosión". "No creemos que eso aporte mucho", ha criticado.
Además, ha apuntado a la abstención en esa moción que en todo caso descartan apoyar: "No nos vamos a oponer a ella, pero entendemos que no es el momento, ni la oportunidad, ni lo más inteligente para conseguir que el Gobierno cambie", ha esgrimido.
"España hay que tomársela un poco más serio y la política un poco más serio que simplemente un par de tardes en el Congreso de los Diputados con alguien que sabe perfectamente que no va a ser presidente del Gobierno y con un partido que se le ha ocurrido incrementar el show parlamentario", ha remachado.