El rey de España Felipe VI asiste a los actos de conmemoración del centenario de la Primera Guerra Mundial organizados por el rey Felipe de Bélgica y el Ejecutivo belga en la localidad de Lieja, en el este.
Se espera que acudan unos 17 jefes de Estado a Lieja, incluidos el presidente francés, François Hollande, y alemán, Joachim Gauch, y delegaciones de 33 países, así como otros representantes de la realeza como el Duque de Cambridge y el príncipe Guillermo de Inglaterra, que vendrá acompañado de su esposa, Kate.
El acto principal arrancará en el Memorial Interaliados de Cointe, donde se desarrollará la ceremonia oficial con las intervenciones del gobernador de la provincia de Lieja, Michel Foret, Hollande, el Príncipe Guillermo de Inglaterra y del presidente alemán y al que seguirá una ceremonia de homenaje a los caídos, que empezará con una ofrenda floral de los Reyes de Bélgica.
Posteriormente, las delegaciones observarán un minuto de silencio en su honor, marcados por salvas al principio y la ceremonia de homenaje se coronará con una suelta de globos por niños y la interpretación del himno europeo y el nacional belga.
Su Majestad Felipe VI será recibido previamente por los reyes de Bélgica Felipe y Matilde en la Abadía de San Lorenzo y tendrá la oportunidad de mantener un encuentro posterior con los jefes de Estado que asisten al acto, según ha informado la Casa del rey.
Antes de la ceremonia principal, el monarca español también será recibido por el primer ministro belga, Elio di Rupo, y el ministro de Exteriores, Didier Reynders, ya en el Memorial Interaliados.
Una vez concluida la ceremonia principal, Felipe VI participará en el almuerzo ofrecido por el rey de Bélgica a los jefes de delegación asistentes, en el Palacio de los Príncipes de los Obispos.
Previamente será recibido por las autoridades locales de Lieja, el alcalde, Willy Demeyer, el gobernador de la provincia, Michel Foret, y el diputado presidente de la provincia, André Gilles.
Lieja fue el escenario de la primera batalla de la contienda mundial (1914-1918), que dejó más de 10 millones de muertos, donde las fuerzas belgas combatieron a los alemanes en la fortaleza de la ciudad, en el río Mosa.
La seguridad se ha reforzado en la localidad ante la presencia de tantas personalidades. Alrededor de 650 policías se movilizarán en concreto para garantizar la seguridad de los jefes de Estado asistentes durante los actos.
El dispositivo de seguridad se completará con 130 cámaras de vigilancia por todo Lieja, un vehículo con cámaras capaces de leer placas de vehículos que vigilará el recorrido de las personalidades a fin de identificar vehículos sospechosos y dos helicópteros de la Policía Federal.
Además, según el diario 'Le Soir', francotiradores de élite darán protección desde posiciones en el aeropuerto de Lieja, al que se espera que lleguen directamente la mayoría de los asistentes, así como en distintos puntos del recorrido del cortejo y se desplegarán baterías antimisiles en el centro de Lieja y en los alrededores.
Los actos de conmemoración no están abiertos al público además, aunque la ceremonia se podrá seguir bien por televisión o desde pantallas gigantes colocadas en la plaza principal de la ciudad Saint Lambert.