Luis Pineda, líder de Ausbanc confiaba en sus posibilidades al ofrecerse a enseñar las oficinas a la Policía. No obstante, pero el juez Pedraz no le ha creído y ha seguido el criterio de la Fiscalía, que pedía prisión incondicional para él.
También para Miguel Bernad, secretario general de Manos Limpias. Así, ambos dormirán en la prisión madrileña de Soto del Real. Según el auto del juez Pedraz, Ausbanc utilizaba la cobertura de una asociación de consumidores para el enriquecimiento de su cúpula.
Con el dinero adquirido financiaba, además, a Manos Limpias, que utilizaba como un brazo judicial para extorsionar a través de querellas. En uno de esos presuntos chantajes, quizá el más llamativo, habrían pedido hasta tres millones de euros para retirar la denuncia contra la infanta Cristina.
Miquel Roca, abogado de la hija de don Juan Carlos, ha negado que negociasen un trato y que la infanta nunca lo supo. "Lo que quiero es una resolución en sede judicial", ha demandado el letrado.
Se dan a conocer así presuntos chantajes que tanto Pineda como Bernad han negado sin éxito ante el magistrado. Además de los máximos responsables de la trama, también han declarado tres personas más. Para el tesorero de Ausbanc, la Fiscalía de la Audiencia Nacional pide prisión eludible bajo fianza de 10.000 euros.
Para los otros dos investigados, el presidente adjunto de Ausbanc y el director de Comunicación de Manos Limpias, comparecencias quincenales y retirada de pasaporte.