El juez Eloy Velasco señala que parte del dinero negro que recaudaba el exsecretario general del Partido Popular en Madrid, Francisco Granados, se usó para amueblar una casa en el barrio de Salamanca de Madrid. Dicho inmueble estaba destinado a una amiga brasileña de Granados.
El juez afirma también que Granados iba anotando en su agenda las presuntas entregas que le hacían empresarios, que se quedaba una parte del dinero y otra la guardaba en diferentes lugares como el altillo de sus suegros.
Velasco también asegura que Francisco Granados quería comprar decenas de naves industriales antes de ser detenidos por un valor de 400.000 euros.