Ya entrado el otoño y con el inicio del frío a la vuelta de la esquina, el precio de la luz continúa disparado. Ante esta situación, el Gobierno ha anunciado este martes un cheque para pagar la calefacción de los hogares vulnerables, que estará dotado con una media de 90 euros.
Así lo ha indicado la titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. "De forma extraordinaria, los consumidores vulnerables van a poder disponer de un dinero extra para afrontar el invierno con cargo al bono social térmico", ha indicado la vicepresidenta tercera, que ha precisado que "en este invierno habrá un cheque de 90 euros por familia para cubrir sus necesidades de calefacción".
"Esperamos pueda estar disponible durante el mes de diciembre", ha agregado Ribera, que ha detallado que el Ministerio que dirige transferirá las partidas correspondientes a las comunidades autónomas, que serán quienes que hagan frente a los pagos. El objetivo de esta ayuda, según ha incidido la ministra, es "dar un mayor volumen de protección para, en los meses del invierno, poder contar con calefacción adecuada en los hogares" y garantizar su "confort térmico".
A preguntas de los medios, Ribera ha precisado que se trata de "un pago único para las personas beneficiarias del bono social, que también tienen derecho al bono social térmico". Este último, ha insistido, lo gestionan las autonomías, a diferencia del bono social eléctrico. Por este motivo -ha dicho- "el procedimiento ahora es que desde el Ministerio haya una transferencia a todas las comunidades" y que estas "activen el sistema de pago único". Por ello, ha añadido, creen que "tardará algunas semanas pero que estará antes de fin de año".
Asimismo, la vicepresidenta ha incidido en que se trata de una medida de carácter extraordinario, que no se consolidará como sistema de cobertura ordinario, sino que se trata de "una medida adicional para un año difícil de precios energéticos altos".
Mayor importe en los lugares más fríos
El Gobierno, según ha indicado el Ejecutivo posteriormente en una nota de prensa, prevé que los precios de la electricidad se mantengan elevados hasta la próxima primavera, por lo que el Consejo de Ministros ha aprobado nuevas medidas para paliar el impacto de la escalada del precio en los consumidores más vulnerables.
Estas medidas incluyen duplicar el presupuesto destinado al bono social térmico, una ayuda directa destinada cubrir los gastos de la calefacción, la cocina y el agua caliente, cuyo importe será diferente en función de la zona climática en la que viva el beneficiario, siendo mayor en las zonas frías que en las cálidas.
Así, el Gobierno ha incrementado la cantidad mínima de este bono -inicialmente fijada en 25 euros- hasta los 35 euros –el equivalente a dos bombonas de butano, según el Ministerio– y ha duplicado el presupuesto destinado al bono térmico durante este 2021, con 100 millones de euros adicionales, hasta alcanzar los 202,5 millones.
Así, el valor del cheque oscilará entre ese mínimo de 35 euros y los 124 euros. Atendiendo al número de beneficiarios, el Ejecutivo calcula que cada beneficiario recibirá 90 euros de media.
Por otra parte, el descuento en la factura de la luz otorgado por el bono social a los consumidores con rentas bajas o circunstancias especiales –recibir una pensión mínima, estar desempleado o en ERTE– crecerá del actual 25% al 60% y del 40 al 70% en el caso de los consumidores considerados vulnerables severos, hasta el 31 de marzo de 2022.