Con el decreto ley las empresas podrán mover su domicilio fiscal sin pasar por la junta de accionistas. El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha dicho que están "dando la competencia para decidir dónde se ubica el domicilio al consejo".
Requisito indispensable hasta ahora para compañías como la Caixa, que podría decidir el traslado de su sede. El presidente de Freixenet ha asegurado también podría irse. José Luis Bonet, presidente de la empresa ha afirmado que "hasta ahora no había creído que esto de la independencia era tan posible; si esto es así, tendremos que actuar como muchos".
La otra gran empresa del cava, Codorniú, con 500 años de historia también ha valorado irse si Cataluña se declara independiente. Los empresarios catalanes piden ayuda al Gobierno. En ARV, Josep Bou, presidente de la Asociación de Empresarios de Cataluña ha afirmado que "si la DUI se declara, serán 100 empresas -que se vayan- por tanto hay que impedirlo".
Ante esta posible salida, la cara visible del independentismo prefiere no pronunciarse. Jordi Cuixart, presidente de Òmnium, ha evitado hacerlo.
Gas Natural o Abertis podrían seguir los mismos pasos, también Catalana Occidente, que ya ha adelantado que tomará las medidas necesarias para proteger a sus clientes. Der Spiegel asegura que podrían sumarse grandes compañías como Vokswagen, Bayer o Seat y Lidl. Estas dos han asegurado que no se irán si no se produce la declaración de independencia.