El Centro de Operaciones de Emergencia de Nepal ha informado en su cuenta de Twitter de la identidad de los dos supuestos ciudadanos españoles, con sus nombres y sus números de pasaporte. "Los cuerpos no pueden ser identificados debido al estado en el que se encuentran (...) Los identificamos en base a sus pasaportes y otros documentos de viaje que tenían en sus bolsillos y mochilas", explicó Prabin Pokharel, vicesuperintendente de la Policía nepalí y que se encuentra en el distrito de Rasuwa (donde está localizado el valle de Langtang). Según la fuente, están esperando la llegada de un helicóptero para trasladar los cadáveres a Katmandú.
El Ministerio español de Asuntos Exteriores indicó no se podrá confirmar oficialmente la identidad de los dos supuestos españoles encontrados en Nepal hasta que no les sean practicadas las pruebas de ADN. Varias fuentes policiales informaron del hallazgo de 53 cuerpos sepultados bajo tierra en el valle, entre ellos el de "una mujer y un hombre españoles", y el de un tercer extranjero de nacionalidad holandesa.
Los otros cuatro españoles que estaban de excursión en el momento del terremoto en el valle de Langtang, muy popular entre los senderistas, son los asturianos Sabino Fernández, Jesús Monteirín, Egidio García y Ángel Hernández Muñiz. La catalana Roser Palau murió también en esa zona aunque su cuerpo fue localizado a comienzos de mayo.
Guardias civiles que habían participado en labores de rescate en Langtang para tratar de encontrar a los españoles indicaron que el lugar quedó destruido por una avalancha de hielo, piedras y lodo que se produjo después del seísmo dejando una estampa "dantesca". La Policía de Nepal sospecha que aún quedan más cadáveres en esa zona, ya que todavía hay unas 300 personas desaparecidas.
El terremoto del 25 de abril, de 7,8 grados, y las posteriores réplicas han causado, de acuerdo con las últimas cifras oficiales, 8.712 muertos y 22.220 heridos. Solo en el valle de Langtang, donde los pueblos de Thyangshyup, Tsarding, Chamki, Gumba, Langtang, Mundu, Singdum y Kyangjing quedaron completamente destruidos, fallecieron al menos 597 personas y otras 771 resultaron heridas. Además, en este valle, frecuentado anualmente por miles de turistas amantes del senderismo de altura, unas 7.040 casas resultaron destruidas totalmente y otras 2.410 de manera parcial, lo que acentúa la tragedia para este enclave a la sombra del Himalaya