Es el abrazo emocionado de Roberto Carmona, exdirigente de Comisiones Obreras en prisión desde el pasado martes. Junto al secretario provincial de UGT en Cádiz, Salvador Mera, fueron puestos en libertad con cargos. Más de un centenar de militantes sindicales les esperaban.
Alrededor de las 3 de la madrugada la juez Alaya abandonaba los juzgados, pero ya no quedaba nadie. Todo lo contrario que a primera hora de la tarde. Mucho apoyo a los compañeros detenidos, y gritos y algún que otro insulto para la juez.
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha reprochado esos insultos por parte de los sindicalistas a las puertas del juzgado. "Nunca compartiré que jaleen a un juez, ni tampoco que le hagan un escrache".