Todos los parlamentos tienen una importante partida presupuestaria para subvencionar el trabajo de los grupos. En el caso catalán, las cifras se actualizarán en la nueva legislatura que arrancará tras las elecciones autonómicas del 21 de diciembre. La subida o bajada en el número de escaños puede suponer una importante variación en los ingresos de los partidos políticos, que se encuentran en pleno proceso de elaboración de candidaturas.
Según las cifras de este año, Junts pel Sí recibirá 7 millones de euros, seguido por Ciudadanos (25 diputados), que cobrará a lo largo del ejercicio 2,99 millones de euros. El tercer grupo, el PSC (16 escaños), ingresará 1,92 millones mientras que Catalunya Sí que es Pot (11) y el PP (11) ingresarán, respectivamente, 1,33 millones. Cierra la lista la CUP (10), a la que le corresponden 1,23 millones.
Esta cifra de subvención a los grupos del Parlament, sólo este capítulo, es similar al presupuesto anual de seis parlamentos autonómicos, que oscilan entre los 13 y los 17 millones de euros: Extremadura, Asturias, Baleares, Galicia, Canarias y Castilla y León.
El mayor legislativo autonómico es el catalán, con 135 diputados y 53,6 millones de coste este año. Es el presupuesto más alto de los diecisiete parlamentos, casi el doble que el segundo en tamaño, la Asamblea de Madrid, que este año tiene unas cuentas de 28,6 millones de euros, y un cuarta parte más alto que el del tercero, el andaluz, que en 2017 alcanza los 40,2 millones de euros, según las cifras de todos ellos recogidas en sus respectivas webs.
La Asamblea de Madrid establece una subvención fija a todos los partidos de 489.000 euros, a lo que se le suma 17.800 euros por diputado, lo que supone una financiación media de 27.000 euros por escaño. En 2017, el PP, partido mayoritario en la Asamblea, contó con 1,3 millones de euros públicos por sus 48 escaños.
En el caso del Parlamento de Andalucía, los partidos reciben una asignación fija de 355.066 euros anuales y el resto del crédito, de casi 10 millones de euros, se reparte entre todos grupos parlamentarios. En el caso del PSOE, partido mayoritario que cuenta con 47 escaños, las subvenciones alcanzan los 4,1 millones durante este año, lo que significa 87.234 euros por cada representante.
Otra forma de revisar las cifras es el coste parlamentario total por escaño. En este ranking se sitúa a la cabeza el Parlamento vasco: tiene un presupuesto total en 2017 de 33,5 millones de euros para el trabajo de sus 75 parlamentarios, es decir, presenta un coste por escaño de 446.000 euros; le sigue el Parlament, con 397.000 euros por escaño y el Parlamento andaluz, 372.000 euros.