El concejal de Ahora Madrid, Guillermo Zapata, ha manifestado ante el juez Santiago Pedraz su "nula voluntad" de ofender a las víctimas del terrorismo con el tuit sobre Irene Villa y ha reiterado la petición de perdón que ya hizo en su día.
Así lo ha expuesto Zapata en declaraciones a los periodistas tras comparecer durante una hora ante Pedraz y la fiscal Blanca Rodríguez como imputado por un delito de humillación a las víctimas del terrorismo en relación con el tuit que publicó en 2011 y que decía: "Han tenido que cerrar el cementerio de las niñas de Alcàsser para que no vaya Irene Villa a por repuestos".
El concejal ha enmarcado el comentario sobre Irene Villa "en un contexto determinado de discusión de los límites de la libertad de expresión". "Por un lado, cuando se decían en la calle estaba en un contexto y cuando se decían en la red estaban en otro", ha explicado a la salida de su comparecencia.
Ha recordado además que no generaron "ningún tipo de daño y de dolor hace cuatro años y en el momento en que han generado daño y dolor yo me he hecho responsable de eso como es mi responsabilidad" y al ser preguntado si iba a dimitir por estar imputado se ha limitado a señalar: "lo que estamos hablando aquí es de un proceso judicial que se ha dado esta mañana".
Zapata fue llamado a declarar después de que la Audiencia Nacional se lo ordenara a Pedraz al hacerle reabrir esta causa que el magistrado archivó en julio tras recibir una carta de Irene Villa en la que aseguraba que el tuit sobre ella no le había causado humillación y que lo consideraba un chiste de humor negro.