Juan Lanzas, exdirigente de UGT, ha sido uno de los primeros en llegar al juzgado tras su detención. Al parecer, fue el cerebro encargado de idear el fraude de los ERE en Andalucía. Lanzas insiste en su inocencia y en afirmar que no es más que una "cabeza de turco" dentro la trama fraudulenta y que ni siquiera sabe lo que son las empresas pantalla. Sin embargo, tal y como publica el diario ‘ABC’, la Policía habría encontrado en su casa 80.000 euros en billetes de 500.
En la ronda de declaraciones, Mercedes Alaya, la juez que instruye el caso, pretende averiguar el paradero del dinero que se blanqueó durante 10 años a costa de las arcas públicas, puesto que de 2001 a 2010 la Junta de Andalucía destinó hasta 721 millones de euros al fondo de los ERE.
A partir de ahí, las aseguradoras habrían ideado una burocracia enrevesada para sacar tajada. De un lado, la consultora ‘Vitalia’, los abogados y los intermediarios, que podrían haberse embolsado 68 millones de euros entre todos mediante el cobro de comisiones de hasta el 20% en vez del 3%.
De otro lado nos encontraríamos con los falsos prejubilados, que se podrían haber llevado los 12 millones restantes hasta cubrir los 80 con los que se juega en la hipótesis de la Policía. De cumplirse las expectativas policiales, el saqueo a las arcas públicas habría sido millonario.
Al fraude en el caso de los ERE se le suma una segunda fase dentro de la trama. Se trata de la denominada Operación Heracles, que vuelve a situar como principal imputado a Javier Guerrero, exdirector general de Trabajo en Andalucía, encarcelado por segunda vez en menos de un año por su vinculación con los hechos.
Supuestamente, Guerrero fue quien dio el visto bueno a una estafa que el PP, a través de su diputado Rafael Hernando, ha calificado como la más grave de España. “No sólo era un caso circunscrito a Andalucía sino que tiene raíces por toda la geografía nacional y yo creo que el señor Griñán tiene que dar explicaciones de forma inmediata”, sentencia.
En el PSOE todo es prudencia en torno al caso. Griñán fue consejero de Economía de 2004 a 2009 bajo la presidencia de Manuel Chaves, que sólo “espera que la justicia siga su curso que termine lo antes posible que pueda aclarar toda la situación”. A día de hoy, las declaraciones continúan y no se descartan nuevos registros.