Las negociaciones entre el PSOE y Podemos para reformar la ley del 'solo sí es sí' están, si no completamente rotas, al menos paralizadas. Así lo ha confirmado este jueves la propia ministra de Igualdad, Irene Montero, que ha indicado en la 'Cadena SER' que lleva días sin hablar con la titular de Justicia, Pilar Llop, desde que esta afirmó el martes en la misma emisora que "no es de recibo" que "salga más barato agredir sexualmente y con violencia a una mujer que robar con intimidación".
A la pregunta de si han hablado desde entonces, Montero ha respondido simplemente con un "no", aunque ha precisado que, con carácter previo a esas declaraciones de Llop, llevaban "meses hablando" e "intercambiando propuestas" para "poder dar una respuesta unitaria como Gobierno". "Yo no me he levantado de la mesa", ha reivindicado no obstante la dirigente de Podemos, que ha manifestado su deseo de retomar el diálogo lo antes posible: "Deseo que podamos volver a negociar cuanto antes", ha asegurado.
Montero ha insistido en la necesidad de poder dar esa "respuesta unitaria" y ha incidido -como ya hizo el día anterior- en que, para lograrlo, está dispuesta a "ceder" en cuestiones como "la subida de penas" aunque no considere que "tengan por qué ser las más efectivas". "La línea roja estaba en no volver al modelo penal de La Manada", ha reiterado, en alusión a la legislación previa que establecía dos tipos penales -abuso y agresión- en función de los elementos de violencia e intimidación.
La ministra, que ha señalado que en el diálogo entre los socios de coalición no solo están implicados su departamento y el que dirige Llop, sino también el propio Pedro Sánchez y "las personas de su máxima confianza", ha defendido que ha hecho hasta seis propuestas de reforma para "cumplir con los requisitos que el PSOE necesita" sin volver al modelo anterior y manteniendo el consentimiento. Con todo, ha asegurado, aún "hay margen para el acuerdo".
Críticas a la propuesta del PSOE
A su vez, Montero ha criticado la propuesta de reforma que los socialistas han presentado en solitario -algo que asegura no entender- y sostiene que "no es una solución al problema", puesto que "ninguna reforma penal va a evitar las rebajas de condenas". Reducciones de pena que la ministra sigue atribuyendo, en todo caso, a "una minoría de jueces que están aplicando mal la ley".
Para la responsable de Igualdad, distinguir "entre agresión con violencia y agresión sin violencia" es "exactamente lo mismo" que volver a la distinción previa entre abuso y agresión y considera "incomprensible" el "empeño" -ha dicho- por volver a ella. "Las feministas no hemos peleado un cambio de nombre, no queríamos que todo se llamase 'agresión' y que se mantuviese el mismo esquema penal", ha sentenciado durante la entrevista.
Asimismo, Montero ha reconocido una "discrepancia política fuerte" con Llop, que el martes defendió que "con una herida ya se puede probar" la violencia en una agresión sexual: "No es fácil demostrar la violencia", ha aseverado a este respecto la titular de Igualdad, que ha argumentado que "la mayoría de víctimas se quedan paralizadas", por lo que "no hay herida ni ninguna otra marca". Así, ha defendido la necesidad de que "nuestra credibilidad y la gravedad de la agresión no dependa de las marcas en tu cuerpo".
"Nadie esperaba que esto pudiera pasar"
Por otra parte, Montero ha defendido que nadie en Ejecutivo esperaba que se produjeran esas rebajas de condena a agresores sexuales, tampoco en el ala socialista: "Claro que no lo esperábamos, no es que sea un efecto indeseado, es que nadie se esperaba que esto pudiera pasar", ha asegurado.
En cualquier caso, y mientras la brecha en el seno de la coalición no da visos de arreglarse, la ministra de Igualdad ha asegurado que las discrepancias con su socio forman "parte de la normalidad de lo que ha sido la legislatura". "He tenido muchas discrepancias con las leyes feministas, esta no me la esperaba", ha admitido no obstante, reconociendo que le resulta "muy dolorosa".
"Hemos tenido siempre la posibilidad de llegar a acuerdo", ha señalado sin embargo, citando como ejemplos la Ley Trans o la reforma de la Ley del Aborto, dos iniciativas a la que el Senado dio luz verde la víspera. Así, ha manifestado que espera alcanzar "un acuerdo antes de la tramitación parlamentaria" de la iniciativa registrada por el PSOE.