La izquierda se mueve y busca el camino para unirse. Tiene un objetivo a corto plazo: conseguir la máxima presencia municipal. IU quiere marcar el paso.

De aquí a noviembre explorará posibles alianzas con diferentes fuerzas en función de las particularidades de cada territorio y sobretodo intentar atraer las movilizaciones sociales, la fuerza de la nueva izquierda.

El PSOE no quiere ni oír hablar de una gran coalición. Todos los dirigentes de la izquierda tiene una idea en su cabeza: pacto. El problema es que la ley electoral, la actual y la que el PP está maquinando, les puede jugar una mala pasada.