En la base les esperaban la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Felix Sanz Roldán; el director y el exdirector de 'El Mundo', Casimiro García-Abadillo y Pedro J. Ramírez; así como familiares de ambos, entre ellos la mujer de Javier, Mónica García Prieto, y sus dos hijos.
Los dos periodistas españoles fueron liberados el sábado en Siria tras seis meses de secuestro, y han aterrizado en Madrid en un avión Falcon 900 de la Fuerza Aérea Española. En la escalerilla del avión, los informadores han sido recibidos con los abrazos de sus padres y familiares, así como por la vicepresidenta.
Después se han acercado a donde se encontraban los directivos de 'El Mundo', y Javier Espinosa, con ironía, ha dicho nada más verles: "Lo siento", pero su sonrisa delataba la alegría que siente de volver a estar en España. Además, sus dos hijos le han dado un ramillete de flores que habían cogido minutos antes en los jardines de la propia base aérea.
Tanto Javier como Ricardo muestran físicamente los signos del secuestro, especialmente el fotógrafo catalán, que luce pelo largo y barba abundante. Está previsto que ahora se desplacen a la redacción de El Mundo para hacer sus primeras declaraciones públicas, según han afirmado a Efe fuentes del periódicos.