El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ha acordado el sobreseimiento de la causa contra el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, por considerar prescritos los delitos por los que se le investigaba por los presuntos encargos de la eléctrica al comisario José Manuel Villarejo.
Según recoge el auto, al que ha tenido acceso laSexta, los hechos con los que se le relacionaban tuvieron lugar entre los años 2004 y 2009 y, por lo tanto, ya han prescrito.
En concreto, la imputación de Sánchez Galán se vinculaba con los proyectos Arrow (de 2004 a 2006), Black Board o B-B (años 2004 y 2005) y los Proyectos Gipsy y Posy (año 2009), cuando ejercía primero como vicepresidente y consejero delegado de Iberdrola y, después, desde 2006, como presidente de la compañía. Villarejo habría realizado los trabajos, según el auto, a través del Grupo Cenyt mientras aún estaba en activo como policía.
Sánchez Galán estaba siendo investigado en este procedimiento por los delitos de cohecho activo continuado, delito contra la intimidad y delito continuado de falsedad en documento mercantil cometido por particular. El juez García Castellón basa ahora el archivo de la causa en otro auto en el que los magistrados resolvieron el recurso de apelación de Rafael Orbegozo, investigado por los mismos delitos.
En él, la Sala estableció que los hechos se produjeron hasta marzo de 2009 y, con ese criterio, ordenaron el archivo de la causa contra Orbegozo, "al haber transcurrido más de diez años" entre el momento de los hechos y su citación como investigado. Así, García Castellón argumenta ahora en su auto que no le queda otro margen que aplicar la prescripción y archivar también la causa para Sánchez Galán.
"La contundencia de esta resolución no deja margen de actuación a este instructor, quien de forma reiterada había desestimado las solicitudes de sobreseimiento y archivo efectuadas por el investigado sr. Sánchez Galán", recuerda no obstante el magistrado, que estima así la solicitud de la defensa del presidente de Iberdrola.
Así, el juez indica que la participación de Sánchez Galán en los hechos investigados comprendería un periodo temporal hasta el año 2009, por lo que han transcurrido más de 10 años entre la fecha en que se cometió el último hecho imputado y la de su citación como investigado, hace ahora un año.
De esta forma, el magistrado concluye que "los delitos imputados a José Ignacio Sánchez Galán estarían prescritos, por lo que no cabría otra opción más que declarar la presencia de esta circunstancia extintiva de la responsabilidad, y con ello decretar el sobreseimiento libre".
En el mismo auto y con el mismo argumento, el juez acuerda también el sobreseimiento respecto de otros dos investigados, José Luis San Pedro Guerenabarrena y Juan Carlos Rebollo en cuanto al delito de cohecho, si bien por el de coacciones en relación de la denuncia del directivo Del Olmo, acuerda remitirlo a un juzgado de Bilbao por no ser competente para instruir estos hechos. La causa, no obstante, sigue abierta para el resto de imputados, entre ellos el exjefe de Seguridad de Iberdrola.