La ejecutiva de Pedro Sánchez ha respondido al "choque de trenes" que vive su partido sustituyendo su propuesta de congreso ordinario en diciembre por la de uno extraordinario el 12 y 13 de noviembre, precedido igualmente de primarias el 23 de octubre para elegir secretario general.
La diferencia entre un congreso ordinario y uno extraordinario es que éste solo decide la composición de los órganos de dirección del partido, no el proyecto político para los próximos años.
La Comisión Ejecutiva Federal leal, que se ha reunido en Ferraz con los miembros más leales a Sánchez, ha modificado el orden del día del Comité Federal del sábado para que debata y vote esa propuesta.
Entretanto, durante toda la mañana 'sanchistas' y 'susanistas' se han enzarzado en una pugna por el control del partido derivada de la incertidumbre que generó ayer la dimisión de la mitad de los miembros de la dirección para forzar el cese del secretario general.
Ferraz ha frenado la pretensión de los detractores de convocar la Comisión Federal de Ética y Garantías del partido para que dirima si la Ejecutiva está disuelta y es preciso convocar un Comité Federal para crear una gestora que tome las riendas del partido.