Varios miles de personas, 100.000 según los convocantes, se han manifestados por el centro de la capital en defensa de la vida, la mujer, la maternidad, la familia y la dignidad humana con gritos repetidos contra el aborto y las leyes que lo permiten. "La caída de la natalidad es la verdadera 'bomba demográfica' de nuestra época", según el manifiesto leído en la Puerta del Sol para celebrar el Día Internacional de la Vida, que se conmemora el 25 de marzo.

La marcha, que se ha celebrado por cuarto año consecutivo, ha sido organizada por la plataforma "Sí a la vida", integrada por más de 500 entidades civiles, que han convocado 70 actos en toda España, similares a otros en Latinoamérica, Estados Unidos y Europa. La manifestación de Madrid, que ha partido de la plaza de Cibeles, ha transcurrido en un ambiente familiar, festivo y tranquilo hasta terminar en Sol.

Allí, cinco activistas de la organización feminista Femen han irrumpido al grito de "Pro vida, genocida", con el pecho descubierto y la cara maquillada como una calavera.

Entre banderines verdes, algunas banderas de España y lemas coreados constantemente como "¡Dejen a los niños vivir!", los manifestantes han reclamado políticas activas que protejan la maternidad, para que las mujeres sean "madres en libertad", además de reivindicar la vida como "principal derecho humano". Encabezaban la marcha dos personajes disfrazados de cigüeña, ave a la que se daban vivas.

En Sol, se han sucedido las actuaciones musicales y los testimonios a favor de la vida y contra el aborto, hasta concluir con una suelta masiva de globos verdes. Ignacio García, director general del Foro de la Familia, ha dicho al comienzo de la manifestación que se pretende despertar la conciencia a favor de la maternidad y de proteger a la mujer que se siente sola ante un embarazo imprevisto.