Las mordazas han recorrido el país en forma de manifestaciones. Es la expresión gráfica del descontento ciudadano contra la ley de Seguridad Ciudadana, que los manifestantes han calificado de represiva y de ser un atentado contra derechos fundamentales.
A golpe de pandereta la criticaban en Madrid, donde se han cifrado en más de un millar de asistentes. Una ley que para muchos manifestantes recuerda a tiempos pasados, "esto es de la época de Franco", ha opinado un manifestante.
En Bilbao las mordazas les obligaban a manifestarse en silencio, el mismo que, según denuncian, trata de imponer la ley de seguridad ciudadana. "Es una ley hecha para ellos, para que no protestemos contra ellos", ha denunciado un asistente. Pero la ley no les amedrenta.
Tampoco en Barcelona donde, según la Guardia Urbana, se han manifestado 3.500 personas, y piensan seguir luchando. "Qué mejor manera que hacerlo protestando", ha explicado un manifestante. No tienen miedo, a pesar de que con la nueva 'ley mordaza' protestar puede costarles muy caro.