El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha afirmado que Miguel Arias Cañete es un "excelente candidato" para las elecciones europeas del próximo 25 de mayo y ha dicho que "lo intolerable es la campaña sucia que pretenden hacerle con mentiras y falsedades".

En una entrevista concedida al diario 'El Mundo' recogida, García-Margallo se ha referido a la situación económica de Arias Cañete y ha indicado que hay que dedicarse a la política "cuando no se necesita para vivir" porque, a su juicio, "sólo así se tiene independencia de criterio y se puede decir lo que piensa en cada momento con la máxima lealtad y sin miedo a perder el puesto de trabajo".

Margallo considera que el Partido Popular Europeo (PPE) "va a ganar las elecciones" y ha advertido de que es un "error" creer que no hay "nada" en juego en estos comicios o "que lo que se decide no es importante, cuando es el 80 por ciento de las políticas de los países".

En relación con la situación económica que vive España, el titular de la cartera de Asuntos Exteriores ha destacado que el Gobierno ha tenido que "cambiar los cimientos de la economía porque el país estaba al borde de la quiebra" y ha reconocido que la actual no es "una situación boyante" y que "la prueba más acuciante para el Gobierno es el paro y la creación de empleo".

Sobre el desempleo juvenil, Margallo ha precisado que cuando se habla del 56% de paro entre los jóvenes "es del segmento de 16 a 24 años" y ha añadido que "la mitad de esos jóvenes están en formación o educación, no buscando un empleo". "Que la situación es difícil, lo sé. Tengo hijos que se han ido al extranjero", ha asegurado.

"Los hechos son tercos. Negar que España progresa me parece una barbaridad y quienes lo niegan lo hacen sólo por miopía partidista", ha señalado, para después defender que la Marca España "funciona" y que está "trabajando para que todos los activos que tiene el país vayan en la misma dirección: empresas, gastrónomos, deportistas, etcétera".

Finalmente, el ministro ha avisado de que en Ucrania se están dando "comportamientos propios de la Guerra Fría" y de que "el lenguaje empieza a parecerse". "Si las cosas van por el camino que van, hay una posibilidad real de enfrentamiento civil", ha concluido.