En los ayuntamientos salpicados por la 'operación Púnica' mandaba uno de los cerebros de la trama, y socio de Francisco Granados, David Marjaliza. Así lo han asegurado varios testigos ante el juez.

"Era el que mandaba en el pueblo, eso era vox pópuli. Mire usted, David Marjaliza movía el Ayuntamiento de Valdemoro. Yo no sé qué hacía, pero todo el mundo bailaba alrededor suyo", explica el empresario Emilio Taramillo.

Lo mismo ocurría en Torrejón de Velasco, donde incluso hacía los pliegos de los concursos. Carmen Gutiérrez, exsecretaria del Ayuntamiento, asegura que cobraba por todo mientras intentaba, además, conseguir chollos.

"La permuta era de un solar, el solar mejor que tenía el Ayuntamiento como patrimonio, por cuatro apartamentos, que eran, vamos, de plástico y a cambio ellos se quedaban, hacía edificaciones, un edificio de no sé cuántísimas viviendas...", ha señalado Carmen Gutiérrez al juez.

Según estas declaraciones, la holgada situación economica de Marjaliza también era de dominio público. Tenía chófer, y las compras de relojes y plumas exclusivas eran habituales.