Según el Diccionario de la Real Academia Española, un relator es, como bien dice la palabra, alguien que "relata o refiere alguna cosa" y su origen procede del latín "relator/oris".
La definición de la RAE
Desde 1992, la palabra cuenta con una nueva acepción, la misma a la que parecía referirse la vicepresidenta Carmen Calvo: "Persona que en un congreso o asamblea hace relación de los asuntos tratados, así como de las deliberaciones y acuerdos correspondientes".
Las reacciones políticas al anuncio de Calvo han sido dispares y los políticos de diferentes partidos han hecho un uso diverso del significado real de la palabra. La consellera de la presidencia de la Generalitat, Elsa Artadi, ha decidido emplear el término "notario" para referirse al relator.
Si acudimos de nuevo a la RAE, comprobamos que un notario es una "persona que deja testimonio de los acontecimientos de los que es testigo".
La diferencia con 'coordinador' o 'mediador'
Durante la jornada, otras palabras han sido empleadas para aludir a esta figura con un papel más activo. Y ninguna de ellas tiene nada que ver con el papel real de esta figura, independientemente del uso que se le aplique después en el caso de Cataluña.
Entre estos términos se ha oído la palabra 'coordinador': "Alguien que dirige y concierta varios elementos". También, 'mediador': "Actúa entre dos o más partes para ponerlas de acuerdo en un pleito o negocio". E incluso se ha dicho 'facilitador': "Hace fácil o posible la ejecución de algo o la consecución de un fin".
Si alguien tenía esperanzas de acertar llamándolo 'observador internacional', que desista, pues la misma vicepresidenta ha afirmado que la figura a la que se refiere "no es un observador internacional ni nadie que venga a mediar, solo ayuda en convocar y tomar nota".
Después de las pistas que Calvo ha ido arrojando en sus declaraciones podemos aclarar que ninguna de las acepciones utilizadas por el resto de partidos se acercan a la definición proporcionada por la RAE ni a la idea que la vicepresidenta tiene de esta figura.
Hasta el momento, algunos se contentan con ver en la figura anunciada un relator en su sentido estricto, otros con la idea de un 'mediador', 'coordinador' o 'facilitador'.
Lo que sí es seguro es que su papel tendrá "la misión de ayudar a los partidos a sentarse y hablar", a pesar de que "su trabajo no estará remunerado".