El viaje del ministro de Interior a Ceuta y Melilla se produce tras una oleada de intentos masivos de entrada en territorio español a través de las vallas de Ceuta y Melilla y tras su reciente encuentro en Bruselas con la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, que cuestionó la intervención de la Guardia Civil, especialmente el pasado 6 de febrero, cuando 15 inmigrantes murieron al intentar llegar a nado a Ceuta por la playa del Tarajal.
El titular de Interior tiene previsto reunirse durante su viaje con los presidentes de Ceuta y Melilla, Juan Jesús Vivas y Juan José Imbroda, respectivamente, así como con los equipos de la Guardia Civil y la Policía Nacional destinados en la zona y visitar los perímetros fronterizos y los Centros de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta.
Este mismo martes, Fernández Díaz ha alertado de que miles de inmigrantes, 80.000 ha dicho, esperan en Marruecos y Mauritania para entrar en España.
Entre otras medias, según han informado fuentes gubernamentales, el ministro anunciará una ampliación no solo del espigón del Tarajal --que actualmente se puede rodear a pie con la marea baja y sobre el que ya avanzó la ejecución de obras "este año" durante su comparecencia ante la Comisión de Interior del Congreso-- sino también del de Benzú, el ubicado en aguas del Estrecho de Gibraltar, que cuatro inmigrantes consiguieron burlar a nado el pasado fin de semana.
Además, Interior prevé doblar el número de efectivos de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil en la ciudad autónoma para que pasen de 30 a 60. El Instituto Armado considera esta unidad "idónea para prestar colaboración en casos de grave riesgo, catástrofe o calamidad pública" y tiene entre sus cometidos fundamentales "garantizar el orden y la seguridad en grandes concentraciones de masas". La Comandancia del Instituto Armado pasará a contar, así, con una Unidad Básica de Actuación (UBA) de los GRS.