No cantar. La celebración de la Misa del Gallo de este año será completamente diferente. A las recomendaciones generales de hablar a distancia y evitar hacerlo a niveles altos para no expulsar aerosoles que puedan contagiar el coronavirus, el Gobierno ha extendido la recomendación a las celebraciones religiosas propias de la Navidad.
Este año, el Gobierno recomienda no cantar en voz alta y mantener la distancia de seguridad. La música tendrá que ser pregrabada en las celebraciones.
Además, la celebración de la misa del gallo estará condicionada por los toques de queda. Según el borrador del plan del Ejecutivo para estas Navidades al que ha tenido acceso laSexta, los actos religiosos podrán celebrarse "siempre que no interfiera con la limitación horaria de la movilidad nocturna". En este caso, se podrá ofrecer como alternativa una retransmisión televisiva de la misma.
El Gobierno plantea un horario especial para el toque de queda en los días más marcados de las vacaciones navideñas: será desde la una de la mañana a las seis de la madrugada.
En el mismo documento se recoge la recomendación de que las reuniones familiares se reduzcan al grupo de convivencia y que no superen las seis personas, respetando, en cualquier caso, las medidas de prevención. Además, se aconseja "evitar o minimizar" las reuniones sociales, que siempre estarían limitadas a seis personas y, preferiblemente, se celebrarían en el exterior.
Además, se recuerda que no deben acudir a ninguna reunión, ya sea social o familiar, quienes presenten síntomas, hayan sido diagnosticados con COVID-19 o estén esperando el resultado de la prueba o puedan haber estado expuestos a la enfermedad.