Monago ha afirmado que sus rivales han intentado borrarle "públicamente y civilmente", pero no lo han conseguido. Se ha pronunciado así en un desayuno informativo, en el que ha estado acompañado por el vicesecretario de Política Autonómica y Local del PP, Javier Arenas; el vicesecretario de Organización, Carlos Floriano, y la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre.
El presidente extremeño ha comenzado su intervención con una cita de la obra "Kafka en la orilla", del japonés Haruki Murakami, que le ha permitido asemejar lo ocurrido con la polémica de sus viajes privados a Canarias con una tormenta de arena que le ha perseguido "como una danza macabra con la muerte antes del amanecer".
Una tormenta de la que ha salido "una mejor persona" y además "un presidente más fuerte, más capaz y más valiente", pues sus rivales le han hecho "más grande". Monago ha recalcado que, por defender los intereses de los ciudadanos, "el sistema" ha intentado borrarle, pero no lo ha conseguido a pesar de que en los últimos días "el sol ha sido un infierno, la luna estaba demasiado alta para poder alcanzarla". "Sólo me debo a mi pueblo", ha subrayado antes de agradecer el apoyo de los asistentes, que le han interrumpido con un aplauso.
Además, Monago ha anunciado que hará públicas todas sus finanzas en enero, dando "mucha más información" que la que aparece en la declaración de la renta, y será el primer jefe de Gobierno autonómico en hacerlo. Ha invitado al resto de sus "compañeros" y a todos dirigentes políticos a seguir su ejemplo. "Si queremos que los ciudadanos nos traten como personas y no como políticos demos pasos que nos acerquen a ellos", ha dicho.
Y ha insistido en que todos los dirigentes políticos deben ponerse "en su sitio, al servicio de los ciudadanos", porque así "volverá la presunción de inocencia" a la política y ésta no seguirá "bajo sospecha". "Hasta los apuntes de la compra" en el supermercado ha prometido enseñar Monago, quien se ha comprometido a aportar todo el estado financiero de sus cuentas, préstamos, avales, valores, depósitos, planes, fondos e hipotecas.
Con esta iniciativa, Monago ha prometido elevar el "techo" de la transparencia "más alto aún de lo que lo ha puesto nadie en el país", con la referencia del funcionamiento del sistema en países como Reino Unido o Estados Unidos.
Ha explicado que, dado que a uno le pueden "inculpar, condenar y lapidar sin pruebas", algo que creía que podría ocurrir "en Burkina Faso", pero a él le ha pasado en España, la única salida es aumentar el nivel de transparencia.
Durante el desayuno, Monago ha planteado de nuevo que no tiene reparos en hablar en el futuro con Podemos o quien haga falta si es en beneficio de los ciudadanos, pues él siempre ha sido más partidario de "extender la mano" que de "levantar el puño".
Ha reiterado -pese a haber recibido "una sopa de 'guantás'" por ello- que una fuerza política que recibe 1.250.000 votos merece respeto y, cuando se le ha planteado si no considera imposible un pacto entre el PP y Podemos, ha recordado que también lo parecía un acuerdo con IU y se ha conseguido sin "ningún estrambote".
"Todo es imposible hasta que se demuestra lo contrario", ha añadido. El presidente extremeño también ha mostrado sus dudas sobre la conveniencia de abrir un debate sobre la reforma de la Constitución sin antes consensuar para qué, pues abrir el melón sin saber cómo se va a cerrar es "una aventura peligrosa".
Ha comparado la Carta Magna como los relojes suizos, que funcionan con precisión, algunos de ellos hechos a mano, pero si se mete la mano sin saber "saltan todas las tuercas". Por ello, ha reclamado al PSOE que concrete qué reforma constitucional propone y ha opinado que "no se puede" ir a un modelo más federal que el que tiene España, pues no hay ninguno en Europa que se compare al español.
En cuanto a Cataluña, ha reconocido desconocer cuál puede ser la solución al problema creado ni si una posible querella de la Fiscalía contra el presidente de la Generalitat, Artur Mas, ayudaría o complicaría esa posible solución, pues se trata de "un asteroide de traza difícil de prever". En cualquier caso, ha pedido respeto a las decisiones judiciales y el cumplimiento de la ley, ante la que no caben "atajos", máxime si uno es presidente de una comunidad autónoma.