La corrupción se ha convertido en el asunto central de la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. Los socialistas han cargado contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tras las últimas informaciones que han salido a la luz sobre su pareja, Alberto González Amador.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha sido la encargada de marcar la estrategia del Gobierno. Ante las acusaciones de corrupción lanzadas por la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, o el portavoz, Miguel Tellado, por los casos de José Luis Ábalos o Begoña López, la vicepresidenta ha respondido recordando el caso de la pareja de Ayuso.
"¿Le dijo a Ayuso que una persona no puede cometer delitos fiscales con facturas falsas, no puede deducirse en las empresas la compra de un Rólex?", le ha preguntado Montero al portavoz de Economía del PP, Juan Bravo, después de que este le indicase que en cada Gobierno en el que participa "aparece corrupción" y le pidiese su "dimisión".
Con esta pregunta, la ministra Montero ha sacado a relucir la información recogida por 'Cadena Ser', en la que señalaban que Alberto González Amador presentó a Hacienda "productos abonados a nombre de su empresa que eran de uso exclusivo" para poder "bajar luego la cuota tributaria", entre los que se encontraban un Rólex, facturas por un saxofón o para la reparación de un Porsche.
Unos gastos que Montero ha calificado de "impropios" y "privados". Por su parte, el ministro de Justicia y Presidencia, Félix Bolaños también ha cargado contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, destacando que "se va de vacaciones a costa de los contribuyentes" y "le está comiendo la tostada" a Alberto Núñez Feijóo.