Granados y Marjaliza son amigos de toda la vida, casi hermanos y dos virreyes del sur de la Comunidad de Madrid. De Valdemoro a toda la región, su influencia en la zona les permitió mirar por su familia. "Forman parte de esa gran familia que está demostrando ser el Partido Popular", explica Serafín Faraldos, portavoz del PSOE en Valdemoro.

En la púnica todo quedaba en familia. De los dos hombres fuertes de la trama surgen las ramificaciones. David Marjaliza, hoy entre rejas es cuñado de Gonzalo Cubas, el alcalde de Torrejón de Velasco, también en prisión.

En Torrejón lo sabía todo el mundo y todos sospechan que Marjaliza se ha beneficiado de esta relación. "Es probable, si es tu cuñado por qué no le puedes ayudar...", afirma Silvia Bonilla, concejal del PSOE en Torrejón de Velasco.

Aquí no acaban los lazos. La secretaria y mano derecha de Marjaliza, Ana María Ramírez, es cuñada del actual alcalde de Valdemoro, ambos también en los calabozos. José Carlos Boza dio sus primeros pasos políticos en Ciempozuelos, aupado por la alcaldesa, que es su cuñada. Allí coincidió con Alfredo Ovejero, también detenido en la Púnica. Ovejero, Boza, Granados y Marjaliza son además amigos de patio de colegio.

"Granados, el actual alcalde, Marjaliza y demás son vecinos del municipio y tienen relación desde pequeños", cuenta el concejal de Izquierda Unida Javier Gómez. "De aquí es todo sabido que esto es un dominio de cuatro familias, esto es un Estado caciquil", decía el exconcejal Miguel Ángel Ortiz en Valdemoro.

Con la plana mayor del Ayuntamiento de Valdemoro detenida, le tocaba recoger la Alcaldía a Germán Alarcón, que ha rechazado esta posibilidad por ser cuñado de Granados.