El presidente de la Diputación de Ourense (PP), José Manuel Baltar, fue cazado a 215 kilómetros por hora el pasado domingo y aunque creía haber dado todas las explicaciones en un comunicado, este viernes en el pleno han vuelto a preguntarle. Su explicación ha sido la misma, la de que "fue un momento de despiste en una recta larga sin referencias de ningún tipo".
Pero los diputados de la oposición no contemplan que pueda calificarse con ese adjetivo rebasar el límite de velocidad en nada más y nada menos que 95 kilómetros por hora. "Estamos hablando de un hecho muy grave. A 215 kilómetros por hora no estamos hablando de un despiste, sino de un delito", expresaba el diputado socialista Ignacio Gómez.
Y para más inri, no se trata de un hecho aislado, según publica 'Radio Ourense-Cadena Ser'. El coche que conduce habitualmente Baltar ha acumulado en tan solo cuatro años hasta diez multas por exceso de velocidad. Una de ellas fue en el año 2019 y ocho que se produjeron entre 2021 y 2022. Es por ello por lo que los grupos de la oposición le han pedido su dimisión, pese a que él ha sido tajante: no tiene pensado dimitir.
En cuanto a las anteriores sanciones, Baltar fue identificado tres veces y fue porque la policía logró darle el alto. Las otras siete, dice el presidente de la diputación, "resultó imposible identificar al conductor".
Según el ordenamiento de la Dirección General de Tráfico, si nadie contesta al requerimiento de quién conducía, la multa sube de 500 a 1.500 euros y al ser coche oficial la paga la Diputación de Ourense. No se trata de infracciones menores, de hecho en otra ocasión un radar fijo pilló ese mismo coche a 157 kilómetros por hora cuando el límite se situaba en 90.
A lo que no ha querido responder Baltar es por qué viajaba en un coche oficial cuando no tenía nada en agenda. Se ha limitado a decir que es de "ámbito privado".