Según datos oficiales de la Cámara Baja, Sánchez es el único exdiputado de la presente legislatura al que la institución venía abonando este tipo de compensación, y la ayuda a la que tenía derecho caduca a final de mes.
El Reglamento de Pensiones Parlamentarias y otras Prestaciones Económicas de las Cortes Generales establece que los diputados que han estado un mínimo de dos años en el Congreso tienen derecho a recibir un mes de sueldo por cada año parlamentario o fracción superior a seis meses, hasta un máximo de 24 mensualidades.
Se trata de una suerte de 'paro' que los diputados han de solicitar y acreditar, además, que no tienen ningún otro ingreso porque esa cantidad no es compatible con otra retribución, sueldo, salario, pensión, dieta, indemnización o percepción de cualquier naturaleza, sea de carácter público o privado.