La empresa estadounidense Pfizer y su socio alemán BioNtech han solicitado ante las autoridades sanitarias europeas la autorización para el uso en la Unión Europea de la vacuna que han desarrollado conjuntamente.
"Para nosotros como empresa asentada en el corazón de Europa se trata de un hito importante, nos seguiremos esforzando por distribuir la vacuna en todo el mundo tras una posible autorización", declaró el presidente de BioNtech, Ugur Sahin.
En un comunicado conjunto las dos empresas han expresado su esperanza en que la vacuna pueda empezar a usarse en Europa antes del final del año.
Según la Agencia Europea del Medicamento, que se ha pronunciado hoy mismo, si sus expertos han recibido suficientes datos, tanto de Pfizer como de Moderna, completarían sus revisiones antes del 29 de diciembre y el 12 de enero, respectivamente.
La vacuna de Pfizer, que demostró ser efectiva más del 90% en la prevención del COVID-19, debe enviarse y almacenarse a -70 grados, temperatura significativamente por debajo del estándar para vacunas de 2 a 8 grados. "Tenemos la esperanza de que los resultados de este plan piloto sirvan como modelo para otros estados y gobiernos internacionales, mientras se preparan para implementar programas de vacuna efectivos", explicó Pfizer a través de un comunicado.
España recibirá 20 millones de dosis de la vacuna de Pfizer, correspondientes de la compra conjunta hecha desde la Unión Europea. Según una estimación del precio, una dosis de la vacuna de Pfizer costaría 16,50 euros.
No obstante, nada se juega a una única carta. En concreto, ahora mismo España forma parte de tres acuerdos para la compra de vacunas: con Sanofi, AstraZeneca y esta última, Pfizer.
Sanidad prevé que la vacunación comience en enero y durante el primer semestre de 2021 ya se haya inmunizado a gran parte de la población, a cerca de 30 millones de personas, un 70%.