La seguridad en los puntos neurálgicos de España está muy presente. Los alrededores de la estación de Atocha Renfe en Madrid llevan días vigilados por Policías Nacionales. Algunos incluso fusil en mano.

En los interiores de las instalaciones también están atentos ante cualquier imprevisto. Porque a pesar de que seguimos en el mismo nivel de alerta por atentados, en lo que va de semana ya se han producido varios desalojos por falsas alarmas.

Por la red corren informaciones falsas que la policía trabaja a destajo para desmentirlos y sancionar a los culpables. Dicen que los ciudadanos solo deben fiarse de las informaciones oficiales.

Los grandes eventos como el concierto de Vetusta Morla en Madrid, donde acuden más de 9.000 personas, están en el punto de mira. La policía vigila de cerca la entrada de los asistentes y están al tanto de cualquier imprevisto.