Prisión sin fianza para el presunto testaferro de Rodrigo Rato. Alberto Portuondo es el primer encarcelado en el caso que investiga al exvicepresidente del Gobierno. Según el fiscal había riesgo de destruir pruebas. Según la investigación ayudó a Rato a cobrar una comisión de dos millones de euros a dos empresas a las que benefició desde Bankia.
Portuondo fue detenido ayer en Barajas cuando iba a coger un avión rumbo a México. Nada hacía sospechar a Alberto Portuondo, exasesor del que fuera presidente de Bankia, del dudoso título que iba a ostentar: ser el primer detenido en ingresar en prisión implicado en el caso Rato.
Alberto Portuondo, administrador de Albisa Inversiones y Asesoramiento, pasaba unos días en Madrid. Según Voz Populi, era habitual de la planta noble de la sede de Bankia y asesoró a Rato en diversas operaciones. "El detenido se embolsó 1,2 millones y 834.000 euros acabaron presuntamente en las cuentas de Rodrigo Rato", explica el periodista Óscar López Fonseca.
Al enterarse del paso de Portuondo por Madrid, la Fiscalía pidió su detención inmediata. Temían su fuga y, lo que es peor, destrucción de pruebas.
Unas pruebas que, según los investigadores del caso, revelarían que Rato blanqueó comisiones ilegales a través de Albisa como empresa pantalla. Las comisiones vendrían de dos empresas publicitarias que, durante el mandato de Rato en Bankia, dispararon su facturación.
La Oficina Nacional del Fraude investiga estos dos pagos de dos millones por servicios nunca prestados a Albisa, empresa que a su vez facturó a Kradonara, entidad clave en el entramado de Rato. De momento, los investigadores sólo han podido saber que de estos dos millones, 420.000 euros fueron a parar al hotel de Berlín del que Rato era copropietario.
Izquierda Unida ha destacado en el Congreso el mayor milagro de Rodrigo Rato: "El milagro económico de Rato es no haber ingresado en prisión", ha afirmado Alberto Garzón.
El responsable de Albisa, dormirá en prisión ante el riesgo de que se fugue y destruya pruebas.