"Bueno, mi arrepentimiento es del 10 de octubre (2017) cuando se esperaba que ese día se declarase la independencia de Cataluña y yo decidí suspender los efectos de esa declaración. Creo que ese fue un error", ha afirmado Puigdemont en una entrevista a la cadena pública británica BBC desde Bélgica, donde tiene fijada su residencia.
En sus declaraciones, Puigdemont dijo que el Parlamento catalán aprobó una declaración de independencia y que el deber de ese legislativo es "aprobar leyes y declaraciones políticas" y "el deber del Gobierno es ejecutar eso y, obviamente, nosotros no ejecutamos el mandato del Parlamento catalán, pero la declaración está".
El expresidente catalán, que habló con la emisora británica en una habitación con un televisor que mostraba imágenes del juicio del 'procés'en Madrid, dijo que se marchó de Cataluña, no porque eligiera vivir "cómodamente", sino porque quería situar el problema de su región en un "escenario mayor" y transformarlo en un problema internacional, "principalmente europeo".
Calificó de "paradoja" que, en su opinión, él sea "un hombre libre en el exilio" en la UE y sus colegas afronten un juicio. Puigdemont admitió que echa de menos a su familia pero que también se siente "en casa" viviendo en la capital de Europa.
El expresidente de la Generalitat afirmó que está bajo vigilancia puesto que dos aparatos electrónicos fueron hallados en dos de sus coches y que esto es investigado por la Justicia belga. Puigdemont vive en Bélgica tras fugarse de España a raíz de la crisis surgida por la convocatoria de un referéndum ilegal y la declaración de independencia de Cataluña.