Begoña Gómez ha sido citada para declarar como investigada el próximo 5 de julio, en el marco de las diligencias previas 1146/2024 por la presunta comisión de los delitos de corrupción en el sector privado y tráfico de influencias.
Esta noticia ha sacudido la campaña para las elecciones europeas, y es que se ha dado a conocer pocos días antes de que se celebren a pesar de que queda un mes para que la mujer de Pedro Sánchez tenga que comparecer ante el juez.
Desde el Gobierno hay una palabra que no dejan de repetir: "extrañeza", y es que no se esperaban que el juez anunciase esta decisión cuando quedan pocos días para la celebración de unas elecciones.
Lo cierto es que el magistrado, con este anuncio, ha roto la regla no escrita que dice que los jueces no deberían tomar decisiones en campaña electoral que puedan interferir en el resultado.
"La prudencia hubiera aconsejado posponer la citación, que además es para declarar dentro de un mes", reconoce el magistrado Ignacio González Vega.
Lo habitual es que los jueces no se pronuncien en campaña electoral. Este es el caso, por ejemplo, del recurso de Vox contra la ley del aborto que el Tribunal Constitucional va a resolver después de las elecciones.
Otro ejemplo sobre una decisión judicial que se pospuso es cuando el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña decidió aplazar el juicio contra tres políticos independentistas acusados de organizar el referéndum el 1 de octubre para no influir en las elecciones catalanas que tuvieron lugar el pasado 12 de mayo.
Una norma no escrita que también se vio reflejada cuando el Tribunal Constitucional decidió esperar a que pasasen las elecciones autonómicas y municipales antes de dar la razón al exdiputado Alberto Rodríguez tras ser inhabilitado y perder su escaño en el Congreso.
Mientras el Gobierno muestra su extrañeza tras lo sucedido, el PP le acusa de señalar a los jueces. "A mí me preocupa que el Gobierno ataque a los jueces, ¿dónde ha quedado la separación de poderes?", pregunta Miguel Tellado.