Celia Villalobos preside el Congreso mientras Rajoy responde a CiU. Es una de las sesiones más importantes del año. Invitados como Cospedal o algunos senadores ocupan la tribuna. En este momento, ella decide ponerse a jugar al 'Candy Crush', un juego en el que hay que juntar caramelos del mismo color.
Le estaba sustituyendo, pero no le pedirá explicaciones, aunque Jesús Posada asumía que no es lo más adecuado. Otra que ha ocupado esa silla, la vicepresidenta tercera del Congreso Dolors Montserrat, no veía nada raro en el comportamiento de Villalobos.
Pero para la oposicion, es una clara falta de respeto. El juego de Villalobos ha sido el protagonista en los pasillos, e incluso se ha colado en el pleno. No sabemos si se pasó la pantalla, porque ha evitado a los periodistas, entrando y saliendo por la puerta de atras del Congreso.