UPyD demandó a los dos dirigentes en septiembre del año pasado al considerar que las acusaciones que hicieron contra UPyD eran una manipulación "absolutamente torticera" de un informe del Tribunal de Cuentas de 2008 sobre la contabilidad del partido.

De acuerdo con la denuncia que presentó la formación magenta, Hernando aseguró en una entrevista con RNE el 16 de julio de 2013 que UPyD se había financiado ilegalmente. Unos días después fue Rafael Merino quien afirmó que en el citado informe del Tribunal de Cuentas se decía que "UPyD tiene una financiación ilegal de 28.000 euros".