De entre todas las cosas que ha dicho Rajoy este fin de semana, una brilla por encima de las demás. Es su apoyo a Miguel Arias Cañete, "es lisa y llanamente el mejor", ha dicho el presidente del Gobierno.
La segunda parte de la campaña comienza con el efecto, todavía vivo, del gol psicológico que el propio Cañete se marcó en propia puerta. Él no pide disculpas, pero sí trata de levantarse de la lona. Regala fotos por doquiere y llena su discurso de referencias a las mujeres que no parecen casuales.
El que por nada del mundo suelta el tema es el PSOE, en 'Al Rojo Vivo', el expresidente del Congreso, José Bono, ha destacado la importancia que tendría para él que "pidiera disculpas". Además, Elena Valenciano, ha dicho que cuando el PP afirma que Cañete es el mejor candidato respalda sus palabras sobre el machismo.
Hay quien lo peor lo ha visto en el mitin de Esquerra Republicana en el que se ha exhibido a Pasqual Maragall, expresidente socialista de la Generalitat y actualmente enfermo de alzheimer. Miembros del PSC ya han dicho que este tipo de cosas no deben hacerse.