La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, ha hecho un llamamiento esta tarde a "la cautela, la colaboración entre administraciones y la búsqueda de soluciones, cada cual en el marco de su competencia, pero apoyándonos los unos a los otros" ante el creciente problema de sequía en España.
En declaraciones esta tarde desde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), ha apuntado que "tenía que haber empezado a llover en octubre y teníamos que contar ya con una capacidad de almacenamiento importante en todas las cuencas geográficas del país", pero no ha sido así y, "tras tres años de sequía, nuestra preocupación por la disponibilidad de agua es importante" en Andalucía y Cataluña.
Ribera ha afirmado que el MITECO trabaja "intensamente" con la Junta de Andalucía y la Generalitat de Cataluña gracias a los equipos técnicos de las confederaciones hidrográficas, la Dirección General del Agua y la Secretaría de Estado de Medioambiente para "activar infraestructuras" y poner en marcha "medidas excepcionales".
Esta actuación debe servir para responder a las necesidades generadas por la sequía "en el conjunto de la población y en particular en el campo" en las cuencas más afectadas, donde la disponibilidad de agua está por debajo del 17 %. Finalmente, la ministra ha recordado la necesidad de "incorporar inversión" para "anticipar escenarios más complejos en los años por venir".
Andalucía y Cataluña, en situación grave por la sequía
Cataluña está siendo uno de los lugares más afectados por la sequía. Si no llueve en condiciones, el próximo 1 de febrero podrían decretar la situación de emergencia en, al menos, 202 municipios de las cuencas del Llobregat y el Ter.
De momento, en pueblos como Castellbell i el Vilar, sus habitantes tienen que recibir agua potable en camiones cisterna y, además, tienen que comprar agua al pueblo vecino. Una situación similar a la que se está viviendo en estos momentos en cerca de 60 los municipios catalanes.
Por su parte, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ya habla de una situación "calamitosa". Un hecho que ha provocado que decida llevar a cabo obras urgentes en los puertos de Algeciras, Málaga y Almería para traer agua de sitios como Portugal o Francia. Además, también ha anunciado la compra de desaladoras portátiles.