Rubalcaba ha insistido ante los medios en que continuará de secretario general hasta que se agote su mandato, en 2016: "Yo tengo un contrato que tiene un tiempo y un contenido; el tiempo son cuatro años y el contenido es un proyecto, cambiar el PSOE para que vuelva a ser el PSOE", ha anotado.

Hasta entonces, se ha propuesto aumentar su presencia en la sociedad como líder de la oposición y su agenda social e internacional, mientras que Valenciano se centrará en coordinar el día a día del partido. La distribución de papeles es uno de los principales cambios que ha introducido para mejorar el funcionamiento interno y para ser más eficaces como oposición

"Cada uno haremos nuestro trabajo y lo haremos mejor", ha zanjado, convencido de que la delimitación de funciones les hará más eficaces y permitirá responder a un clamor de la militancia, que el partido y su líder tengan más presencia en la sociedad. Valenciano se concentrará más en el trabajo interno del partido, coordinará la Ejecutiva y las relaciones de ésta con los grupos parlamentarios.

Rubalcaba ha querido concluir manifestando su apoyo a la portavoz en el Congreso, Soraya Rodríguez en un momento en el que algunos diputados socialistas han expresado sus discrepancias con su trabajo al frente del grupo.El secretario de Organización, Óscar López, que verá mermadas sus competencias con estos cambios, se centrará en "organizar" -ha precisado Rubalcaba- y en impulsar el proyecto "Hacer PSOE 2015", con el que los socialistas quieren, entre otras cosas, ampliar su base social.