En coche oficial, sonriente y saludando, así ha llegado Mariano Rajoy al Congreso de los Diputados, mientras que Albert Rivera lo ha hecho andando acompañado de su equipo de negociación. Ha entrado con paso firme y ha asegurado estar "satisfecho".
Una vez dentro, la última reunión antes de la firma del pacto ha sido en la mesa donde se han debatido cada uno de los puntos. Rajoy y Rivera se han dado la mano ante la atenta mirada de sus equipos negociadores y además se han sentado rodeados de sus hombres de confianza.
Han firmado el acuerdo de investidura los portavoces de cada partido, Rafael Hernando por parte del PP y Juan Carlos Girauta de Ciudadanos.
Una puesta en escena muy distinta a la que hubo en el pacto entre PSOE y los de Rivera.
En esa ocasión estaba todo muy bien estudiado, desde la entrada en la sala, la firma en una mesa con Sánchez y Rivera únicamente y la foto final de los dos líderes políticos frente a los medios de comunicación. Una puesta en escena que fue duramente criticada por Rajoy en el debate de investidura.
"Hacía pensar que estabamos ante una página histórica de dimensiones solo comparables al pacto de los toros de guisando", afirmaba Rajoy por aquél entonces y cuando le han preguntado porque no han firmado el acuerdo los dos líderes, Rajoy ha vuelto a recordarlo "los toros de guisando".
Otra de las diferencias ha sido el escenario de la rueda de prensa. Mientras en el pacto con Sánchez la comparecencia fue frente al cuadro del abrazo, que sirvió a lo medios para bautizar el acuerdo, en esta ocasión las declaraciones han sido en el tradicional atril.
Este pacto que podría sumar 170 síes, a la espera de Coalición Canaria, pero que aún son insuficientes para que Mariano Rajoy sea investido presidente.