Óscar López ha calificado la convocatoria de un Congreso Extraordinario en julio de "decisión drástica". Será meses antes de las primarias abiertas de las que tanto han presumido. 

Sin embargo, el hecho de hablar de Congresos, hace que en el PSOE todo el mundo piense en bicefalia y en la derrota de Almunia, como secretario general, derrotado en primarias por Josep Borrell. 

Los postulados para luchar en primarias no comprenden la forma de actuar de Rubalcaba. Antes de elegir quien opta a gobernar el país elegirán quien opta a gobernar el PSOE. Para ello, el congreso de julio será decisivo.

Haciendo un repaso a la historia reciente de la formación, cabe destacar el congreso número 35. En él hubo sorpresa. José Luis Rodríguez Zapatero llegó como desconocido y salió como secretario general. Fue por unos pocos votos, igual que el último congreso de Sevilla, en el que Rubalcaba se impuso por la mínima a Chacón. 

La ventaja para unos, y problema para otros, está en que si en el Congreso sale un líder respaldado unánimemente será mucho más difícil encontrar a quien dé el paso para presentarse a esas primarias abiertas.