El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne (Vox), ha decidido agarrarse a la inviolabilidad parlamentaria para archivar su causa tras ser imputado por un presunto delito de odio por haber rasgado la fotografía de Aurora Picornell, asesinada en 1937 con ocasión de la Guerra Civil española.

Le Senne ha decidido escudarse en la inmunidad recogida en el artículo 71 de la Constitución Española y el 44 del Estatut de Autonomía. Así lo ha confirmado él mismo a través de sus redes sociales, destacando que es uno de los argumentos que han alegado en el escrito que han presentado solicitando el archivo del procedimiento.

Sin embargo, en estos apartados se ofrece inmunidad por las opiniones que vierten los diputados en los plenos, pero no se dice nada acerca de los actos.

Por ejemplo, en el Estatut, el artículo recoge que "los diputados del Parlament balear no estarán vinculados por mandato imperativo alguno y gozarán, aun después de haber cesado en su mandato, de inviolabilidad por las opiniones manifestadas y por los votos emitidos en el ejercicio de su cargo. Durante su mandato no podrán ser detenidos ni retenidos, salvo en caso de flagrante delito, en todo caso, corresponderá decidir su inculpación, prisión, procesamiento y juicio al Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears".

En este caso, a Le Senne se le está juzgando precisamente por el acto que tuvo al arrancar una fotografía del ordenador de una diputada socialista y no por una opinión vertida durante dicho pleno.

El juez imputa a Le Senne

El juez de Instrucción número 1 de Palma ha citado a declarar en calidad de investigado al presidente del Parlament balear por rasgar en un pleno la foto de la militante comunista mallorquina Aurora Picornell, asesinada en 1937 con ocasión de la Guerra Civil española.

La Associació de Memòria Democràtica de Mallorca, que presentó una denuncia penal contra Le Senne por este suceso, ha informado de que el presidente ha sido citado por el juez el 27 de septiembre a las 9:30 horas en los juzgados de Vía Alemania de Palma y, a las 11:30, la diputada socialista y miembro de la Mesa del Parlament Mercedes Garrido, en calidad de testigo.